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Equipos De Refrigeracion

Sobre La Conservación De Alimentos En Frío

Sobre La Conservación De Alimentos En Frío

Existen muchos mitos sobre la conservación de alimentos en frío. De esta forma, muchas personas han dado por ciertas, numerosas creencias que no tienen el más mínimo fundamente científico. El problema con estos mitos no sólo implican una falta notable de conocimiento, sino también prácticas que pueden ser letales, para la salud de una comunidad.

Para acabar con estas creencias, lo primero que hay que entender es que la refrigeración y congelación de alimentos, junto con los equipos que las realizan, son muy eficientes.  De la misma manera, se debe comprender que el frío no elimina la actividad microbiana, puesto que únicamente ralentiza su desarrollo. Esto permite concluir que los alimentos, una vez producidos, deben ser sometidos a un proceso de conservación en frío. Para ello, existen cámaras especiales, en las que carnes, frutas y verduras, pueden ser almacenadas a temperaturas controladas antes de su transporte.  En el transporte de alimentos perecederos, también se debe contar con sistemas, que posibiliten llevar productos, a temperaturas que permitan su conservación.

Otro de los mitos sobre la conservación en frío, es que basta con meter los alimentos a un sistema de refrigeración, para que éstos se conserven. La verdad es que para que los alimentos mantengan su calidad, deben ser almacenados de la forma adecuada. De este modo, cuando se almacenan alimentos en un frigorífico es importante acomodarlos, para que haya una buena circulación de aire. Es por ello que no hay que “amontonar” alimentos y se debe dejar espacio entre ellos, de la misma forma, se debe evitar que hagan contacto con paredes, techos o pisos. Asimismo, cualquier equipo de refrigeración debe ser limpiado, de manera periódica, con el fin de eliminar residuos y escarchas.

Algunas personas dudan sobre la congelación y refrigeración de alimentos, puesto que creen que con estos procesos, éstos pierden sus valores nutritivos. Lo cierto es que los alimentos, que se someten a conservación en frío, guardan sus principales cualidades nutricionales como proteínas, vitaminas, sales minerales, carbohidratos y grasas. Para evitar daños por frío, hay que controlar la temperatura, al interior de los sistemas de refrigeración. De la misma manera, se debe mantener una temperatura estable, para  evitar que la actividad microbiana se reactive.

Otra cosa que se debe saber sobre la conservación en frío, es que es un proceso que se da desde la producción, hasta instantes previos al consumo, de cualquier alimento. De esta forma, la refrigeración de alimentos no es sólo obligación de las compañías que los producen, o de los almacenes que los venden; sino también de los consumidores que los adquieren.

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